24 marzo 2016

La Vaquería Montañesa

¡Hola!
Hoy es Jueves santo y muchos de vosotros quizás ya estéis en alguna parte disfrutando de vuestras vacaciones. Yo estoy de camino a la nieve para aprovechar los últimos días de la temporada, ¡qué ganas de llegar!
Aún así, seguro que sois varios los que os quedáis en Madrid estos días, así que no quería irme sin recomendados un buen restaurante.
Se trata de La Vaquería Montañesa. Está situado en la calle Blanca de Navarra, junto a Blanca 6, restaurante ideal del que ya os he hablado. Quizás os suene el local porque anteriormente es donde estaba el famoso bar llamado Vaquería Suiza y, respetando que allá por los años 70 era una vaquería de verdad, ha reabierto sus puertas bajo el nuevo nombre de La Vaquería Montañesa.
Para sus dueños, el tema de la gastronomía no es novedad, puesto que este es el séptimo restaurante que abren entre Madrid y Santander. Entre ellos cabe destacar Deluz en Santander o La Carmencita y Celso y Manolo en Madrid.
Aún así, esta última apertura es totalmente diferente a las anteriores, con un aspecto muy elegante, sencillo y con guiños al estilo nórdico. 
Al entrar llama la atención la barra de mármol, una preciosa colección de fotografías y las lámparas suspendidas, pero nada de extravagancias puesto que ahí lo importante es la materia prima.
Yo fui a cenar con dos amigas. Al leer la carta, una de ellas la definió como "un cuento", así que creo que lo mejor es que lo leáis vosotros mismos ;) :

"Tenemos una barra de mármol que hemos construído para marcarnos una entrada al más puro estilo de Ottonleghi de Notting Hill. Servimos “Roasted vegetables y crudités con salsas vacilonas” con las mejores verduras de la huerta de Tudela, ecológica y centenaria de la finca “La Trailla”. Tenemos tomates con pasaporte diplomático. Picoteo madrileño de raciones con rabas a la madrileña, marisquete castizo. En La Vaquería Montañesa comerás el mejor plato guardado por los pastores: el Frito de lechazo ecológico en taquitos crujientes; comerás terneras cántabras ecológicas de 9 vaqueros montañeses valientes porque fueron los primeros hace 15 años en reivindicar el pastoreo tradicional. Te brindarás un rostï con bechamel gordita y huevos ecológicos de gallinas felices y los pollos sin estrés de dos veterinarios valientes, Santiago y Guillermo con sus dos granjas ecológicas en Segovia…"

Suena bien, ¿verdad? Pues está todo muy rico. Nosotras pedimos alcachofas fritas, ensalada de 5 tomates, taquitos de pollo a la sartén y la cheesecake hecha con queso pasiego. ¡Estaba todo buenísimo! 
Tengo que reconocer que las raciones no son muy grandes, pero el producto es inmejorable.
El servicio fue buenísimo y tienen horario ininterrumpido de 13 a 1am.
Os lo recomiendo para cualquier día, ya que el precio es muy asequible y se come muy muy bien.

Dirección: C/ Blanca de Navarra, 8
Tlf: 911 387 106
Web: www.lavaqueriamontanesa.com

Dicho esto, espero que paséis una buenísima Semana Santa y nos vemos a la vuelta :) 
Recuerda que puedes seguirme en Facebook: De mi mano

18 marzo 2016

Cosas que ver en Edimburgo

¡Hola!
Ya es viernes, ¡por fin! Se acerca Semana Santa y seguramente ya todos tengáis algún plan, pero para el próximo puente o vacaciones, os recomiendo que tengáis muy en cuenta la ciudad de la que os voy a hablar hoy, ¡es increíble!
Estuve en Edimburgo cuando era muy pequeña. Mis tíos vivían en Escocia y me fui con ellos un par de semanas en verano para practicar el inglés. Hicimos una excursión a Edimburgo pero con 13 años que tenía, lo que menos me apetecía era hacer turismo, así que no tenía muchos recuerdos de la ciudad.
El fin de semana pasado volví, y aluciné en colores. Organizamos ahí la despedida de soltera de mi cuñada. Ella está enamorada de Edimburgo y pensamos que lo mejor era llevarla allí de sorpresa. Obviamente no se lo esperaba y casi se desmaya de la emoción, jejeje. Pero al pisar esa ciudad, entendí la cantidad de veces que ella soñaba con volver allí.
Viajamos 6 chicas, y alquilamos un apartamento a través de AirBnb (empresa que utilizo casi siempre cuando viajo en vez de ir a un hotel). Fuimos de viernes noche a domingo. Muy poquito tiempo pero suficiente para ver muchas cosas.
Edimburgo no es una ciudad grande, y si vais poco tiempo como en nuestro caso, os recomiendo coger el autobús hop on, hop off (nosotras cogimos el de color rojo). Te sirve para conocer un poco la historia y puedes bajarte y subirte en las estaciones que más te apetezcan a lo largo de todo el día. 
Gracias a eso vimos bastantes cosas que os cuento a continuación, pero el resto de recomendaciones me las habéis hecho por instagram y me las apunto para la próxima vez que vaya (¡gracias! :) )
Cosas que hacer:
Edimburgo se divide en dos zonas: la zona antigua y la zona nueva. Nosotras nos alojamos en la nueva, pero están ambas muy cerquita y una frente a la otra. Las separa una avenida que se llama Princess Street, donde están todas las tiendas grandes y conocidas. Desde ahí se puede ver el precioso castillo y todo el casco antiguo, hacia donde merece la pena cruzar andando y recorrer las calles medievales.

- Visitar el museo nacional de Escocia: es gratuito y está dentro de los más visitados del mundo. Las vistas desde la planta de arriba son muy bonitas.
- Pasear por los cementerios: preciosos y muy bien conservados.
- Subir el Arthur's Seat: es un paseo precioso hasta el pico más alto de las colinas. Se tarda una hora y media aproximadamente y las vistas son increíbles.
- Entrar en Saint Mary King´s Close: es el callejón más antiguo y popular de la ciudad, pero también el más siniestro. Dicen que da un poco de claustrofobia, pero si es tan popular, será por algo ;)
- Cotillear la universidad que está en mitad de la ciudad.
- Pasear por la calle Royal Mile: la que conecta el Castillo de Edimburgo con Holyroodhouse (ambas visitas obligatorias) y por Rose Street.
- Ir a desayunar al mercado de Stockbridge el domingo por la mañana: allí encontrarás productos típicos y frescos de la ciudad bajo los toldos de colorines y un ambiente muy auténtico.
- Tomar una cerveza en algún pub de Grassmarket y subir/bajar por Victoria Street para ver sus fachadas de colores y tiendas antiguas.
Excursiones:
- Al norte de la ciudad está el barrio de Leith, el cual tiene un puerto precioso conocido como The Shore: es una zona súper animada, llena de restaurantes a la orilla del río y tiendas para visitar.
- Dean Village: es una localidad que también bordea el río Leith y que tiene muchísimo encanto. Se tarda un poco andando desde el centro de la ciudad, pero merece la pena.
Saint Andrews: es una de las ciudades más antiguas e históricamente importantes de Escocia y está situada en la costa este. En coche se tarda como 1 hora y media desde Edimburgo y es una excursión obligatoria si vas varios días porque dicen que es un lugar inigualable. Sus paisajes, castillo, naturaleza... ¡todo es increíble!
- Highlands y Lago Ness: se puede hacer una excursión de un día para visitar esta increíble zona. En el viaje se puede ver el castillo de Stirling, el parque natural de Trossachs, el valle del Glencoe del que dicen que es el mejor paisaje de Escocia. Después hay que seguir hacia Forth Williams, pasar por el Gran Valle hasta llegar a Forth August, a orillas de Lago Ness. Allí se puede dar un paseo en barco o hacer un picnic admirando el paisaje.
Yo esta parte no la conozco, pero todo el mundo que ha estado, me ha dicho que es una auténtica maravilla.
Donde comer:

The Red Squirrel: un pub muy chulo y con ambientazo en el centro.
- Elephant House:  si os gusta Harry Potter, en este restaurante es donde JK Rowling escribió los libros.
- Royal Oak: pub divertido donde tocan música en directo. 
- Scran & Scallie: un restaurante muy agradable donde comer o cenar bien y tranquilo.
Galvin Brasserie de Luxe: este restaurante fue nuestra elección para la cena especial del sábado. Se encuentra en el hotel Waldorf Astoria, pero es bastante asequible de precio. El lugar es perfecto para una cena un poco más formal, se come fenomenal y el hotel es una pasada por donde recomiendo cotillear un poco ya que vais :) 
- Conan Doyle: fue donde tomamos el brunch antes de coger el avión de vuelta. Pertenece a los restaurantes Nicholson´s pubs y la decoración recuerda a una saloncito escocés, ¡es precioso! El brunch que nos tomamos estaba buenísimo y es un lugar perfecto para pasar un buen rato.
The Witchery by the castle: es un hotel/restaurante pequeño y medio escondido bajo unos árboles. No estuve comiendo ahí, pero lo descubrí cotilleando por un callejón y creo que es de los restaurantes más bonitos y románticos que he visto en mi vida. Ojalá pueda ir a una cena romántica ahí algún día (ejem ejem... jejeje). El hotel creo que es demasiado tétrico, pero el restaurante The Secret Garden es una pasada.

Donde salir/tomar copa:
- Spit/Fire: al entrar parece un bar normal, pero si bajas unas escaleras tras lo que parece la puerta de incendios, te encuentras con The bar below. Se trata de un bar clandestino muy curioso dentro de una cueva. Entramos ahí el primer día por casualidad. Pensábamos que iba a ser un antro y resultó ser un sitio lleno de gente con buena pinta y muy animado para tomar una copa tranquila de primera hora. ¡Merece la pena!
- Opal Lounge: es una de las discotecas más conocidas de la ciudad por su buena música y buen ambiente. Nosotras fuimos y lo pasamos muy bien.
- El barrio: discoteca latina donde tomar mojitos y bailar reggaeton.

La zona de George Street con Hanover Street está bastante animada y hay varios bares y discotecas de todos los tipos.

Hasta aquí mis recomendaciones, pero estoy segura de que hay muchas más. Espero que os sirva a los que me habéis dicho que vais en Semana Santa y cuando vuelva a ir (no tardaré mucho), os contaré más cositas. :)

¡Feliz Semana Santa!
Recuerda que puedes seguirme en Facebook: De mi mano

14 marzo 2016

Bump Green

¡Hola!
El restaurante del que os voy a hablar hoy está siendo un éxito y seguro que habéis oído hablar de él, por lo que antes os quería hacer una pequeña reflexión para tener un poco más de información.
Hay ciertos movimientos que de repente se ponen de moda y no paramos de oír hablar de ellos hasta que terminamos un poco saturados de que todo sea igual. Pero es cierto que cada cosa tiene su momento y hay que saber aprovecharse de ello desde el minuto 1. 
Ahora que no paramos de escuchar palabras como "healthy", "orgánico" o "detox" y que estábamos empezando a saturarnos de que todos los restaurantes fueran iguales y ofrecieran lo mismo, aparece BumpGreen siguiendo el movimiento eco y de slowfood
El objetivo de esta forma de vida es limpiar tu cuerpo por dentro con la comida, o incluso con la ayuda de algún zumo "detox" de vez en cuando para que el efecto sea más rápido (no se yo si esto funciona mucho, ¿lo habéis probado?). 
Yo he empezado a comprar en el supermercado orgánico Herbolario Navarro y he de reconocer que estoy encantada. Tienen mucha variedad de productos e ingredientes que sientan bien a mi cuerpo y cada semana probamos algo nuevo que nos encanta.
Por esa razón, BumpGreen me cautivó desde que entré, porque ha sabido coger lo bueno de los materiales orgánicos ofreciéndolos en un entorno precioso rodeado de naturaleza. 
La decoración recuerda a una pequeña casita de la campiña inglesa. Tiene  muebles vintage, tejidos de Gastón y Daniela y piezas decorativas que además, ¡se venden!
También cuentan con una mini terraza para morirse y plantas por todos los lados. Es un espacio que te invita a "pensar en verde" desde que entras y a concienciarte de que ahí ofrecen algo tan necesario como la comida saludable y auténtica.
En cuanto a la comida, sus chefs están comprometidos con una cocina creativa y sana basada en los principios Bueno, Limpio y Justo; y eso es lo que demuestran con sus platos originales.
Utilizan recetas de toda la vida pero elaboradas y reinventadas con productos ecológicos y locales. Por ejemplo: el hummus está realizado con otros ingredientes mucho más sanos y sabe exactamente igual al clásico (o mejor).
Nosotros fuimos a cenar cuatro personas y salimos realmente encantados. Para compartir empezamos con el hummus y la coca-pizza. De segundos nos trajeron   la cachean (ternera sobre brasas y cenizas), las texturas bumpgreen (caliente/frío de pescado), los espagueti de calabacín y la burguer de rabo de toro. Todo estaba realmente exquisito y nos sorprendieron la mezcla de sabores y los platos tan originales.
De postre elegimos las texturas de cacao y la tatín de manzana. ¡Qué rido todo!
Nos gustó muchísimo. Además el trato fue muy muy bueno y de vez en cuando se nos acercaba uno de sus dueños (también artífice de Miss Sushi pero cuyos proyectos no tienen nada que ver) para explicarnos los sorprendentes ingredientes de cada una de nuestras elecciones.
También cuentan con una tienda para llevarte lo que más te haya gustado o saborear algunos de sus batidos.
Nos quedamos muy contentos y además fue una cena "sana, sabrosa y sostenible", adjetivos que utilizan sus dueños para definir el proyecto. ¡Enhorabuena!
Dirección: C/ Velázquez 11
Tlf: 911 96 20 18
Web: la página web está en construcción, pero actualizan mucho su página de Facebook: BumpGreen Restaurante

Si te gusta este tipo de comida y quieres practicar este estilo de vida, en Madrid hay otros restaurantes a los que puedes ir. 
Hace un tiempo os hablé de Mama Campo, que fue una revolución en su momento y que sigue siendo todo un éxito tras varios años desde su apertura. 
También está Olivia te cuidaIl Tavolo Verde o el recién abierto Bio in the bowl.
Recuerda que puedes seguirme en Facebook: De mi mano

08 marzo 2016

Nuestra boda- Ceremonia

¡Hola!
Os prometí que os iba a seguir contando cosas de la boda, y aquí van más detalles sobre la iglesia y la ceremonia. El primer post lo habéis leído miles de personas, así que me alegro mucho de que os haya gustado y espero que éste no sea menos ;) 
Después de contaros todos los detalles sobre cómo íbamos vestidos y cómo nos pusimos guapos para el gran día, toca hablaros de la ceremonia, que a veces nos olvidamos de que es la parte más importante de una boda y también necesita mucha preparación.
Como os comenté, la celebración fue en nuestra finca y habíamos elegido la Iglesia de Belmonte de Tajo para casarnos. Es un pueblo pequeño y más o menos de fácil acceso. 

Llegada a la Iglesia:
Tenemos la suerte de que mi padre tiene una ganadería y varios coches de caballos. Por lo que para mí, llegar a la iglesia en uno de ellos era una cosa que me hacía muchísima ilusión desde pequeña (y a él también). Lo tuvimos claro desde el principio y disfrutamos muchísimo con la preparación de los caballos, coches, etc...
De la finca al pueblo se tardan como unos 10 minutos en coche normal, pero en coche de caballos bastante más. Así que yo fui en coche normal hasta una "granja" escondida que había en el pueblo, y me cambié al coche de caballos rodeada de gallinas. Fue de todo menos glamouroso, pero era la única opción para que no me viera nadie... jejeje.
Para la llegada, mi padre y yo habíamos planeado ir en un carruaje cerrado (modelo coupé) , ya que Alejandro y los invitados me iban a ver entrar en la plaza, y no quería que se me viera el traje antes de tiempo.
La iglesia está situada justo encima de la plaza del pueblo, por lo que todo el mundo me vio llegar desde arriba de la escalinata que da acceso a la iglesia. Fue precioso y recuerdo que ahí es cuando me puse nerviosa. 
Hasta entonces había estado muy tranquila y pasándomelo fenomenal, pero fue ver a Alejandro y a toda la gente esperándome y pensé:¡ Ay, qué me caso!
Cuando el coche se paró, la gente ya fue indicada a entrar en la iglesia para que yo pudiera bajarme. Con la ayuda de mi padre y mis hermanas, me bajé con cuidado (estos coches son muy altos y con la puerta estrecha para un vestido de novia, jeje) y me dirigí a la iglesia.
Entrada y coro:
Mientras tanto, Alejandro hacía la entrada con su madre y la canción de Master and Commander, versionada por Grupo Alborada.
Grupo Alborada fue nuestra elección para el coro, ya que tocan versiones preciosas y tienen mucha variedad de instrumentos para que tú formes tu propio coro con tus preferidos (aquí podéis ver todo el repertorio de canciones para boda religiosa).
Mi entrada fue con mi canción favorita: Vivo per Lei, también versionada por ellos. Ninguna de las dos canciones que elegimos para entrar eran canciones religiosas, pero la ceremonia todavía no se da por comenzada hasta que la novia llega al altar, por lo que está aceptado por la iglesia. 
He de reconocer que estaba temblando mientras caminaba hacia el altar. En las fotos salgo con la cara desencajada y estuve apunto de llorar cuando vi a Alejandro emocionadísimo al fondo. 
Mi padre me lo notó porque dice que le apreté la mano suuuuuper fuerte y le dije: voy a llorar. Él me conoce muy bien y me dijo para hacerme reír: "¿quieres que nos vayamos? ¡Estamos a tiempo!" Yo me partí de risa y eso evitó la lagrimilla. ¡Gracias papi! :D
Ceremonia y preparación:
La ceremonia fue preciosa y muy personal porque nos casó el cura que nos preparó para el matrimonio, por lo que nos conocía bien. 
Hicimos el curso de novios en Schoenstatt, y para nosotros fue lo mejor de los preparativos. Se trata de un cursillo que dura 3 meses y del que aprendimos muchísimo. 
Desde entonces, siempre recomendamos a todas las parejas que lo hagan (incluso si todavía no tenéis planes de boda). Es cierto que una boda necesita mucha preparación, pero... ¿quién nos prepara para el matrimonio? A mí me da mucha rabia las parejas que se toman el cursillo como un simple papeleo de un par de horas para que el cura les deje casarse. No debería ser así porque es de los pasos más importantes de una vida y mucha gente no es consciente. 
Creo que, si de verdad esperas respetar a tu pareja para siempre, aprender a convivir con ella y valorar lo importante, deja que alguien te aconseje, por mucho que pienses que sabes y controlas todo a día de hoy. 
Hay que invertir tiempo en estudiar una carrera, ¿verdad? Pues para que un matrimonio funcione, también hay que dedicarle tiempo porque tras lo bonito de la boda, eso es lo que queda. Es un consejo que os doy a los futuros novios, nosotros entendimos y aprendimos muchas cosas del otro gracias a esos meses. Así que, para los que estéis interesados, este es el link del de Pozuelo, pero también lo hacen en la C/ Serrano: curso de novios Shoenstatt :)

Decoración:
La iglesia era de piedra de colmenar en tonos grises/beige y todo muy clarito, con muchísima luz. Por lo que la decoración queríamos que fuera en esos tonos y no muy recargada. Para ello forramos los reclinatorios de color beige y pusimos una plataforma forrada en color tierra para subirnos nosotros y que se nos viera bien desde las filas de detrás. A eso añadimos unos  cestos con flores campestres y olivos pequeños a los lados del retablo, altar y a la salida. Quedó precioso, sencillo pero muy acorde con nuestra personalidad y con el resto de la decoración de la boda.
Para la decoración contamos con la ayuda de Claudia, de A-Típica y las flores nos las puso Floreale.
Como "damitas de honor" llevé a mi sobrina Julieta y a mi ahijada Blanca. Blanca es bastante alta, por lo que ella entró detrás mío para no taparme y era quien me ayudó a colocar mi cola y mantilla. Ambas llevaban un vestidito de lino con encaje en la parte de abajo y un lacito de raso del mismo color que mis zapatos. Lo combinamos con alpargatas beige de tiras, un canotier y cestitos de paja donde llevaban los anillos y las arras. ¡Iban bonísimas!
Salida:
Tras la ceremonia, salimos con la Marcha nupcial de Mendelssohn (pelos de punta cada vez que la escucho...) y nos subimos de nuevo en el coche de caballos. Esta vez era mi favorito, una carretela preciosa blanca con cuatro caballos, en la que soñaba subirme desde pequeña. ¡Estaba feliz con mi recién estrenado marido!
Nos siguieron en otros carruajes mis padres, mis suegros y mis hermanas.
Esta vez hicimos todo el recorrido hasta la casa, porque paramos en medio de la finca a hacernos nuestra sesión de fotos de novios. 
Sesión de fotos:
Eran más o menos las 20.30h del 13 de Junio y se estaba empezando a poner el sol, por lo que la luz era realmente preciosa. El campo estaba lleno de espigas y nos quedaron unas fotos perfectas  gracias a Liven. Pero sí, tengo que reconocer que las espigas se clavan, se me rompieron las medias por mil lados y los zapatos se me llenaron de pinchitos... Aún así, el resultado mereció muchísimo la pena, jejeje.
Estuvimos como media hora haciéndonos fotos. Es algo que también recomiendo hacer a los novios. Cuando sales de la iglesia, tienes unas ganas enormes de que empiece la cena y la fiesta, pero en realidad, no pasas apenas tiempo con tu pareja, por lo que éste momento de las fotos de novios son los únicos 30 minutos en los que vas a disfrutar de él/ella. Los invitados van a esperar a los recién casados lo que haga falta, tomándose una copita y hablando en el cocktail. Así que tomaos vuestro tiempo, dad un paseo, hablad de cómo os sentís y saldrán fotos bonitas para el recuerdo, ya que es cuando más relajados vais a estar.
Después de eso llegamos a la casa donde nos estaban esperando todos los invitados... Pero eso en el siguiente y último post ;)
No pretendía hablar tanto, pero no quiero que se me olvide nada... ¡Espero que os haya gustado y FELIZ DÍA DE LA MUJER! 
Recuerda que puedes seguirme en Facebook: De mi mano

02 marzo 2016

Chantarella

Este nombre quizás os suene a más de uno. Chantarella era un restaurante muy conocido en la calle Doctor Fleming, donde se comía muy bien pero con un aspecto antiguo y quizás un poco caro para ir a una comida informal.
Tras el cierre de ese local, el equipo decidió cambiarse de calle dentro del mismo barrio y montar un nuevo restaurante mucho más renovado y con precios más asequibles para todos.
Bajo el mismo nombre, han ocupado el espacio donde antiguamente estaba el restaurante Las Cumbres (conocido por toda la generación de nuestros padres), que luego pasó a un asiático llamado Tai Chi (¡me encantaba!), y que ahora los españoles han vuelto a adueñarse de él.
La verdad es que el sitio está muy logrado. Siempre me ha gustado mucho ese local porque tiene un ventanal enorme que da a una calle muy tranquila por la que apenas pasa gente, por lo que entra mucha luz y no te sientes observado ni distraído por los paseantes.
Nada más entrar, han puesto una barra rodeada de mesas altas donde se puede comer o tomar algo rápido de picoteo. Me encantó el detalle del suelo, creando formas geométricas con los azulejos. La decoración en esta sala es muy acogedora y sencilla, con sillas y taburetes aterciopelados rodeando las mesas de madera.
Tras unos paneles de madera entreabiertos se accede a la sala del comedor. Aquí encontramos mesas bajas con sofás corridos también de terciopelo y unos cuadros preciosos colgados de la pared. El suelo es de madera en este caso, las paredes claritas y con iluminación indirecta en algunas zonas. Al fondo han conservado el famoso Buda que presidía el antiguo restaurante, pero le han dado un toque más moderno para que esté acorde con el nuevo local.
En cuanto a la comida, ofrecen una amplia selección de platos de muy buena calidad a buen precio. Tienen la opción de degustar medias raciones y los platos son perfectos de cantidad.
En mi caso, fui con mi familia el sábado pasado. Éramos seis personas y, para los entrantes, nos dejamos aconsejar por el encargado. Pedimos las empanadillas de huevo con pisto manchego y aceite de trufa; el timbal de cus-cus con uvas y tarrina de foie caramelizada; y los mejillones en salsa con un toque picante. Todo espectacular, sobretodo la empanadilla de huevo con pisto.
De segundo fuimos poco originales y todos pedimos casi el mismo plato. Unos optaron por los raviolis de pato con escabeche de miel y piña fresca; y los demás el atún vuelta y vuelta con wok de verduras. Los segundo también exquisitos.
Aunque no nos quedaba mucho espacio para el postre, no nos pudimos resistir a su tarta de queso con gel de ciruelas al vino tinto; y la torrija pasiega con helado de pacharán.
Fue una comida súper agradable en un sitio que nos encantó por todo. El trato fue maravilloso y los platos estaban deliciosos. 
Además tienen menús especiales para grupos y una terraza que pondrán en verano súper apetecible.
Ya les dije que volveré ;)

Dirección: Av. Alberto Alcocer 32 (Entrada por calle Condes del Val)
Tlf: 910341384

¡Espero que os guste!
Recuerda que puedes seguirme en Facebook: De mi mano